Un ejercicio diseñado para liberar el exceso de ira del cuerpo.
Mientras estás de pie, inhala y levanta los brazos por encima de la cabeza, elevando los hombros. En cada exhalación y movimiento hacia abajo, concéntrate en liberar la ira con movimientos poderosos e intencionales.
Este ejercicio aprovecha la respuesta de 'lucha' del cuerpo, permitiéndote expresar y liberar de manera segura la ira reprimida. Al moverte físicamente y vocalizar, estás imitando los mecanismos naturales de liberación de estrés en el cuerpo, lo que deja al cuerpo sintiéndose más tranquilo y centrado.
Comienza con los pies separados a la anchura de los hombros para estabilidad y respira profundamente.
Al exhalar y bajar los brazos, visualiza tu ira saliendo de tu cuerpo y asegúrate de hacer una exhalación audible.