La dieta juega un papel crucial en el mantenimiento de la salud del sistema nervioso. Los nutrientes en los alimentos son esenciales para el correcto funcionamiento del sistema nervioso. Por ejemplo, los ácidos grasos omega-3 son importantes para el desarrollo y funcionamiento del cerebro, y la vitamina B12 es esencial para la formación de mielina, la capa de aislamiento que rodea las células nerviosas.
Ciertos alimentos también pueden tener un efecto positivo o negativo en el sistema nervioso. Por ejemplo, los alimentos inflamatorios como el azúcar y los carbohidratos refinados pueden contribuir a la inflamación en todo el cuerpo, incluyendo el cerebro. La inflamación causada por la dieta puede llevar a problemas como el deterioro cognitivo y desequilibrios en el estado de ánimo.
El microbioma intestinal, la comunidad de microbios que viven en el tracto gastrointestinal, también juega un papel en la salud del sistema nervioso. Algunos de estos microbios producen ácidos grasos de cadena corta que pueden tener un efecto positivo en el cerebro. También ayudan a descomponer los alimentos, lo que permite al cuerpo absorber más nutrientes. Los alimentos que proporcionas a tu microbioma intestinal determinan qué especies aumentarán o disminuirán en población.
Por otro lado, los alimentos antiinflamatorios y los alimentos ricos en antioxidantes pueden ayudar a proteger el sistema nervioso de daños. Y finalmente, el 96% de nuestra serotonina, una hormona principal que estabiliza el estado de ánimo, se crea en el intestino. Al evitar los alimentos inflamatorios cuando sea posible, aseguramos que la producción de serotonina no se vea interrumpida, y como resultado, un estado más equilibrado en general.
Una dieta saludable es un ingrediente clave para el correcto funcionamiento del sistema nervioso. Los nutrientes en los alimentos son esenciales para el desarrollo y funcionamiento del tracto digestivo, y a su vez, del sistema nervioso.
En promedio, los miembros de NEUROFIT que priorizan una dieta de alta calidad reportan un 30% más de chequeos equilibrados y un 10% más de HRV.
Andrew es Co-CEO en NEUROFIT y graduado de Caltech con 10 años de experiencia en tecnología y productos, impactando millones de vidas en NASA, Snapchat, Headspace, el Centro de Inteligencia Emocional de Yale y sus propias startups de bienestar.
Después de enfrentar dos décadas de estrés crónico, agotamiento y C-PTSD, lanzó NEUROFIT para proporcionar una solución efectiva, basada en datos y accesible a estos desafíos.